miércoles, 15 de abril de 2015

Trabajo

Pienso, no actúo: Del laburo y sus cosas

Un tema bastante polémico, aún más si como yo eres redactor y quieres usar este medio como una muestra de lo que haces en tus horas "extras" porque si hay algo de lo que querrá asegurarse el dueño, gerente, jefe o mujer(mayor) solterona y con altas necesidades sexuales QUE NUNCA FALTAN en tu lugar de trabajo, es que no tengas horas extras para nada, y que vivas, respires y transpires trabajo, trabajo y más trabajo, y me disculpan si me pongo ansiosa y loca con este texto, pero mis manos están que perforan el teclado de nada más recordar las palabritas 'Aquí no pagamos horas extras' 'Trabaja pensando en tu propio bien, es tu portafolio' 'Será que me haces un favorcito' entre otras (No es lo mucho, es lo seguido).

Vamos, que con todos los jefes y compañeros de mis trabajos anteriores me las he llevado y aún llevo de maravillas, de hecho, siempre poniendo todo en balanza, son muchísimos más los buenos recuerdos que los amargos y nunca he llegado a discusiones fuertes que no me permitan encontrarme a cualquier fulanito del trabajo 'x' en la calle y no saludarlo sin hipocresías. Pero, qué hacer en caso de que estés pasando por uno de esos momentos incómodos donde sientes que te están exigiendo un "poquitín" más de la cuenta, cómo le dices a tu jefe que también tu cuerpo tiene necesidades biológicas como dormir, o que puedes omitir esas necesidades, digamos, con un considerable aumento de salario, cómo te armas de ese valor cuando eres un Junior, cómo te armas de valor cuando eres el que limpia pisos en una heladería de lunes a lunes, cómo te armas de valor si llevas seis años en el mismo puesto, estancado, en una relación de amor y odio con tu jefe/jefa, ese que tiene el codo de dinosaurio (no puede estirar la mano hasta el bolsillo) pero que a la vez es tan cool cuando salen por unas copas luego del trabajo ¿CÓMO? No sabemos porque nunca nos atrevemos, terminamos buscando otro empleo a hurtadillas, volteando cada cinco minutos a ver si no nos cachan, el cuento termina en que te buscas otro trabajo y vuelve a repetirse la misma historia.


Pero el punto es que tu trabajo vale, ¡Créeme! Si eres joven probablemente te encuentres en una vorágine laboral, pero dilo (Siempre con educación, respeto, bla bla, ya sabemos) haz saber que tu trabajo vale, que quemarse las pestañas no solo trae beneficios para tu carrera, para el negocio también ¡Y bastante!, así que humildemente pide el puesto o salario que ambos saben que mereces, aquí no estoy alcahueteando a flojos, hay que darlo todo y hacer sacrificios por mucho tiempo, calladitos y con buena actitud, esperando que ellos te den el valor que te mereces, y si pasa el tiempo y nada de nada ¡PLEASE, ACTÚA!

Piensa y actúa


  • ¡Sé productivo! Haz las horas extras que creas necesarias, muéstrate agradecido siempre, aprovecha la oportunidad y recuerda que aunque no te guste oirlo "Trabajar duro pero dentro de tu área siempre traerá beneficios laborales a futuro" Nota: no permitas que esto deteriore tu salud o vida social
  • No le des tantas vueltas al asunto, probablemente tu jefe viene observando tu desempeño, no renuncies a un trabajo sin comprobar si tienes una real oportunidad de crecimiento, tocar no es entrar ¡Pena son cuatro letras!
  • Si estás trabajando en negro pero estás legalmente en el país, NO pierdas un día sin mandar tu Currículum, no desesperes, la oportunidad va a llegar. No te conformes con el trabajo en la heladería
  • Aquí tienes una lista estimada de cuánto debería ser tu salario en caso de trabajes en una Agencia de Publicidad http://www.sup.org.ar/salarios/salarios-agencias.html actualizado en diciembre 2014
  • Si tienes un problema más serio y sufres algún tipo de maltrato laboral, entra a http://www.trabajo.gob.ar/oavl/ e infórmate sobre cómo podrías tener asesoramiento en tu caso, esto en la República Argentina
  • Hakuna Matata, el trabajo es una parte fundamental en la vida pero ser feliz lo es aún más. Quédate en ese trabajo que más que riquezas, te llene de conocimientos, tranquilidad y la satisfacción de saber que haces lo que amas 

Pensando conscientemente las cosas, siempre llegaremos a algo.



















Laura Bravo 
*Imágenes extraídas de psichi.org y -gadgetgirl- en Flickr 

martes, 7 de abril de 2015

Animales

Pienso, no actúo: Maltrato animal

Hace unos años tuve una de esas fiebres WWF que no paró en nada. Mi sueño era ser miembro del Sea Shepherd, eventualmente no le conté ésto a nadie porque iban a pesar que era una 'hippie Wanna be' y no quería escuchar sus comentarios, yo solo soñaba que iba en un barco insultando a japoneses y tirándoles piedras. No soy vegetariana, de hecho amo el sabor de la carne y odio la doble moral que siento al comer chuleta de cerdo mientras veo programas de maltrato animal con lágrimas en los ojos, todo ésto termina en zapping para no torturarme sabiendo que no puedo hacer nada al respeto y que de cierta manera soy parte del sistema que mantiene vivo este tipo de torturas, un cerdo fue torturado para que te comas esa deliciosa chuleta y tienes que vivir con eso ¡Qué crueldad el remordimiento! Pero vivimos, continuamos, y criticamos SIEMPRE a esas personas que tienen el nivel de crueldad contra los animales un poco más subido de tono, esos que usan pieles y comen aletas de tiburón ¡No podemos evitar pensar que irán al infierno! Comer carne de vaca no es grave, de perro SÍ, ¡Desalmados! 

Me gusta leer los comentarios de Calamaro sobre la tauromaquia, y algunos de los comentarios e insultos que los detractores le dicen <Me divierten un poco esas peleas>. Éste es una claro ejemplo donde me veo flotando en medio del océano sin derecho a nadar hacia ninguna dirección, porque al comer carne nunca te será permitido opinar libremente sobre el maltrato animal. Por un lado el cantante apoya la tauromaquia de una manera absurda, y por el otro los detractores vegetarianos demuestran su misantropía, un toma y dame que nunca termina en nada porque al final cada quién piensa lo que le da la gana y seguro que la mayoría de esa gente lo que hace es pensar y no hacer algo al respecto sobre la causa que defiende. Volviendo al punto, me molesta que al ser carnívora no tenga derecho a opinar sobre el maltrato animal, y aún más molesto es saber que es cierto. Pienso y no actúo de nuevo, porque definitivamente es muy difícil cambiar una costumbre alimentaria, a personas como nosotros nos queda la humilde tarea de darle comida a perritos de la calle, no usar abrigos de piel o no ir más al circo, nunca eso sí, perdiendo la dignidad y compartir fotos en facebook de perritos de tres patas que con likes conseguirán una pata biónica.  

¿Ser vegetariana? No por ahora gracias, seguimos en el bando de los ni-ni, Lucero nos tildará de que no tenemos moral para criticarla, mientras que PETA nos querrá cambiar completamente hasta volvernos evangélicos o chicos de Herbalife, así de apasionados seríamos que no podríamos ni hablarles a nuestros monstruosos padres carnívoros. 

Para simples mortales, hay algo en lo que sí podemos ayudar:

Piensa y actúa

Pensando conscientemente las cosas, siempre llegaremos a algo.















Laura Bravo
*Imágenes extraídas de Pinterest